Valores de vida.
Nací en Santiago la populosa capital de Chile, en la comuna de Providencia en el mitigo Hospital Salvador un día 13 de Octubre del año 1963.
Llegué a al mundo en silencio; bebe tranquila, dócil, afable, cariñosa y muy expresiva, para algunos un ser transparente, a tal punto que las personas podían ver a través de mí.
Desde que tengo memoria, uso de razón, conocimiento de causa y entendederas; viví, pasé y gocé mi infancia y adolescencia en la comuna de Renca. En esos años… campo, vegetación, animales sueltos, sin ataduras ni encierros, al igual que yo.
Lejos están los días en que solía jugar durante todo el día, sin otra preocupación, que dejar en libertad mis pensamientos y mis sueños.
Por lo regular, las personas nos saludan en el día de nuestro cumpleaños o aniversario, obsequiándonos abrazos, parabienes y algún recuerdo material. Hoy deseo ser yo quien les obsequie a ustedes en este día tan especial para mí. Quiero que entren en mi vida, en mi infancia y en la tierra que me vio crecer.
Muchísimas gracias por existir y por ser parte de mi vida.
¡Dios bendiga a cada uno de ustedes!
Valores de vida
(A mis amados padres)
Día y noche, sol y luna,
luceros brillantes mi vida iluminan.
Para un largo camino me prepararon,
muchos valores mis padres me entregaron.
Criterio certero es aquel que te guía
en el actuar de cada día.
Con nostalgia y alegría recuerdo cada tunda
que me dieron en mi vida.
Obstinada y testaruda,
jamás comprendí lo que ellos decían,
pues siempre fue mejor
hacer lo que yo quería.
En mi infancia y juventud
viví muchas experiencias,
algunas salvajes
y otras de gran influencia.
Luchando en el piso
con mi hermano me encontraron
¿Por qué lo haces?... muy serios preguntaron.
Yo respondí… ¡Él es el más amado!
Consejo sabio me dieron ese día:
“La envidia y los celos no son buenos
y debes aceptar
que se quieren a todos por igual”.
¡Baja de allí!
Muchacha traviesa,
te vas a caer
y te romperás la cabeza.
Me atraparon un día
apretando al gato
con tanta energía
¡Qué casi lo mato!
Consejo sabio me dieron ese día:
“Respetar y amar la vida de todo ser
con humildad y alegría
debes conseguir”.
Rigurosa educación pon mucha atención:
“La verdad siempre presente,
aunque ésta duela en el momento,
más la mentira te dañará para siempre”.
Ésta es la guía con la cual gobierno mi vida.
¡La verdad me hace libre y soberana!
Cuando alguien, con su mano, mi vida daña,
recuerdo a mis padres y sus lecciones sabias.
Filosofía de vida:
Esfuerzo constante, nada es gratis,
lo aprendes y lo escuchas.
¡Con atención seguí su lucha!
Ser responsable y respetuosa,
siempre puntual y laboriosa.
Trabajo forzado,
día ganado.
Continuamente presentes, siempre a mi lado,
mis padres en mi vida jamás han faltado.
En cada problema y en cada sufrir con los
brazos abiertos dispuestos a su hija a recibir.
Mirada atenta y sigilosa
siempre tendrán
porque ser padres
no se puede olvidar.
A ser un buen padre nadie te enseña
sólo te guía el amor; ética y moral, fuerza y entereza.
Son los ejemplos y no la razón
los que se guardan en el corazón.
Año tras año, con cariño y emoción,
recuerdo mi pasado
porque un buen día descubrí
¡Qué ellos siempre, tuvieron la razón!
Cecill Scott.
©Todos los derechos reservados.
Comentario
ADELANTE, LA PERSONA LO ES POR TENER VALORES
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