LA LEVEDAD DEL SER
La levedad del ser.
La intolerable liviandad de los sentidos.
El peso que se teje con hilados muy finos.
Una canción que anuncia la explosión
y el gemido. Victoria de lo denso.
Devorados los besos hasta el último aliento
esperando rozar el infinito.
Culminado el proceso
el etéreo momento se aproxima
dejando sólo un hueco en el lugar del hecho.
Abstracto sentimiento que ha partido.
El ser se va esfumando
recamado de ausencias.
Estira sus dos manos. Desesperado intento.
El placer ha surcado el fulgor de un instante
y se pierde en el eco deslucido.
Liviandad que fascina.
El alma se muerde los amores
en afán de guardarlos como obsequio de gozo.
Nada queda aferrado
es liviano el sentido
y se va suspirando su sonido
sin posarse en el nido.
El ser aspira el aire que recorre los momentos vividos
y la brisa se lleva los amores
sin cautivar el cuerpo definido
que agoniza de frío.
BEATRIZ OJEDA
DERECHOS RESERVADOS
Comentario
Un placer disfrutar de la lectura de tus hermosos y reflexivos versos querida amiga, un cariñoso abrazo.
Muy bello. Delicado.
PRECIOSO QUERIDA POETA
..Es así el ser humano, en su levedad... "El hombre nunca puede saber qué debe querer, porque vive solo una vida y no puede compararla con sus vidas precedentes ni enmerdarla en sus vidas posteriores.
Bea Ojeda, buena referencia al genio checo Milan Kundera.
Gracias por compartir con este trovador que te lee, tales razonamientos. Un saludo desde la distancia. Donald
Excelente poema
gracias
mary
Liviandad que fascina.
El alma se muerde los amores
en afán de guardarlos como obsequio de gozo.
Nada queda aferrado
es liviano el sentido
y se va suspirando su sonido
sin posarse en el nido.
El ser aspira el aire que recorre los momentos vividos
y la brisa se lleva los amores
sin cautivar el cuerpo definido
que agoniza de frío.
Definitivamente bello y sublime, cual suspiro que deja su ambrosía para el deleite de nuestra existencia en este universo que nos abraza con sus azares y bondades.
La vida siempre en ese laberinto existencial que nos seduce y nos arrebata entre desvelos. Son tantas las emociones, tantos los sentires que dejan huellas y escriben sus propios derroteros. Tantas veces pretendemos aferrarnos a lo agradable, al eco de la esperanza, al suspiro fehaciente que desordena el alma para atraparla entre sus redes apasionadas, pero no es posible, todo es tan efímero como lo es nuestra existencia. Tan sólo los recuerdos permanecen intactos y en su onírico desborde nos hacen alcanzar el gozo en su revuelo.
Me ha encantado, mi querida amiga de bellas e intensas letras.
Te felicito y aprecio tu entrega e inagotable creatividad.
Saludos cordiales con mi admiración de siempre.
El turbulento amor de los sentidos,
que devora la difusa calma. Así es, mi querida amiga
Beatriz. Lo describes muy bien en tu poema.
Felicitaciones.
Recibe un cordial saludo.
Devorados los besos hasta el último aliento
esperando rozar el infinito.
Culminado el proceso
el etéreo momento se aproxima
dejando sólo un hueco en el lugar del hecho.
Abstracto sentimiento que ha partido.
El ser se va esfumando
recamado de ausencias.
Estira sus dos manos. Desesperado intento.
El placer ha surcado el fulgor de un instante
y se pierde en el eco deslucido.
¡Cómo quisiéramos guardar esos sentimientos que nos fueron tan queridos para siempre! ¡Ese fulgor de la juventud y el entusiasmo con el que tejimos sueños y amores! Lamentablemente todo en la existencia es efímero, solo nos queda el recuerdo de todas esas circunstancias que deseamos atesorar.
Maravilloso poema, Beatriz, como siempre es muy grato leerte.
Felicitaciones y gracias por tu aporte.
Agregado por Nilo 0 Comentarios 1 Me gusta
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