Cínico es don Juan tenorio
porque teniendo mujer
domingo al atardecer
pidió a una moza casorio.
Armándose el gran jolgorio
mientras la doña lloraba
gritando que lo adoraba
frente al vasto repertorio.
Y lo mandó al reclusorio
ella que tanto lo amaba.
Chillando que lo adoraba
fueron directo al togado
pidió de juicio abogado
ya en la locura bogaba.
Y nada la consolaba
pues lo quería a su lado
era su sueño adorado
y más cuando la besaba.
Si no buen sainete armaba
al don Juan enamorado.
En tanto por otro lado
detestable corrupción
de manos hubo apretón
protegiendo al inculpado.
¡Buenísima la función!
se descubrió la traición
un matrimonio anulado
y un juramento violado.
Por culpa de la obsesión
y del destino marcado.
Al escuchar Agapita
se armó la buena revuelta
¡La chamuca andaba suelta!
peligrosa la damita.
Tomando el agua bendita
dándose la media vuelta
creyéndose diosa celta
junto con su amiga Rita.
Gritaron al magistrado
¡que al don habían comprado!
En una tarde de cuita
que Rita era señorita
pero de cascos ligeros
en todos los gallineros.
Conquistaba la negrita
a don Juan le puso cita
detrás de inmensos graneros
bebiendo de sus veneros.
¿Cómo que tiene mujer?
recitó algo atolondrado.
Pegando un grito el togado
se sintió desfallecer
¡castiguen al liado infiel!,
las mujeres por su lado.
En espectáculo actuado
recitando al juez aquél.
de él amaban su ojimiel
ya lo habían perdonado.
Lo tenían controlado
siendo dueñas del vergel.
Autora: Ma. Gloria Carreón Zapata.
Imagen tomada de Google.
Comentario
¡Ah Glorita, grandiosos versos sobre Juan Tenorio de Zorrilla, poeta dramaturgo español!
La obra se desarrolla en Sevilla. Juan Tenorio hizo una apuesta con su rival don Luis Mejía sobre cual de los dos cometían mayores fechorías, acumulando riquezas y mujeres en un año. Y ahí empiezan todas las conquistas y muertes también de ambos, al final gana Juan Tenorio. Y don Luis viendo al otro ganador lo vuelve a desafiar diciéndole que no había ninguna monja en su lista de conquistas. Juan Tenorio, le dice que no solo conquistará a la religiosa sino también conquistaría a su novia (de Luis Mejía) que se llamaba Ana, a quien llega a conquistar. Aquí es cuando entra en escena doña Inés, que estaba en un convento. Éste comprando a la criada, entra al convento y se enteró de todo el padre que era el Encomendador Don Gonzalo. Al final del primer acto, Juan Tenorio mata a don Gonzalo y a Luis Mejía y huye de Sevilla.
Bueno al final, regresa después de cinco años Juan Tenorio, y estando a puertas del infierno, se salva Juan Tenorio y va al cielo por el alma de doña Inés, (ya había muerto) que lo seguía amando pese a todas sus conquistas. Bueno esto sucede en el segundo acto donde la obra se volvió fantástica.
¡Me encantaron tus décimas mi querida amiga!
Gracias por refrescarnos la memoria, al publicar sobre nuestro tan conocido y vilipendiado don Juan Tenorio!
Bravo amiga!
Miles de graciasssss...
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