ARAMINTA
Araminta es sin dudas el más límpido espejo
que nos enseña el daño que trajo la desgracia.
Conformada por seres con el rostro bermejo
que rápido instauraron la inútil oclocracia.

De ese modo lograron un inmenso cortejo
y empezaron a emplear la dañina falacia.
En las arcas dejaban solamente el pellejo
y odiaban a la gente de conducta reacia.

Torturaban sedientos como rudos nerones
Sembraban sin problemas falsas acusaciones
y empleaban la sangre como si fuese tinta.

Y a las mujeres nuestras humildes y decentes,
sí hablaban del sistema los turbios delincuentes
daban el mismo trato que dieron a Araminta.
II
Araminta aparece como esa inmensa hoguera
que iluminaba calles y cautivaba gente.
Pero feos sujetos quebraron su bandera
y un fusil venenoso la amenazó inclemente.

Después de atormentarla dejaron que sufriera
recluyendo sus formas en un sórdido ambiente.
Le arrancaron con saña su negra cabellera
que la sangre bajaba mojándole la frente.

La rudas cancerberas le quitaban el sueño
haciéndole maldades con singular empeño,
para que reconociera un delito infundado.

Le robaron la Biblia, rompieron sus pinceles,
con los que dibujaba los castigos tan crueles
que perversas verdugos le habían prodigado.
III
Dolor y sufrimiento fue la enseñanza diaria
que aprendía Araminta del azote severo.
Sus guardianas tenían el hambre sanguinaria
y reclamaban algo de un humilde cordero.

A veces en las noches de manera arbitraria
la lanzaban al baño convertido en chiquero.
Argumentando siempre la norma estatutaria,
que dice que las presas deben lavarse el cuero.

Pero no explicaban cuáles eran las razones
porque a la joven presa no le daban jabones,
en aquellos espacios sin mucha pulcritud.

De esa manera aviesa la estaban doblegando
y paulatinamente su aspecto fue cambiando.
porque estaba fallando bastante su salud.
IV
Para ser muy formales le abrieron un proceso,
con un juez escogido para tales propósitos.
Que no sabía sino de algún negocio expreso
y si ya estaban listo sus múltiples depósitos.

Era un ser detestable ya pasado de peso
y bastante rastrero para sus despropósitos.
Pero sabía muy bien manejar la sinhueso
la cual ameritaba ponerle sus apósitos.

El juicio instaurado tenía algo de misterio
y el juez lo conducía conforme a su criterio,
pero no se había hecho ni la primera audiencia.

Ya que el tosco letrado faltaba a sus labores
y la pobre Araminta pasaba sinsabores,
cuando veía que el juez brillaba por su ausencia.
V
Nuevamente a la cárcel a padecer ultrajes.
A sufrir la rudeza que produce la inquina.
A mirar a los ojos de esas bestias salvajes
que perdieron temprano la gracia femenina.

En la lóbrega celda fue objeto de chantajes
para lograr sustento, cobija y medicina.
Y luego utilizaban los clásicos pillajes
para quitarle todo por mala disciplina.

Pero la Providencia se apiadó de su caso
y realizó la audiencia el magistrado craso
que acabó con la espera totalmente arbitraria.

Y en el curso del juicio su mente arrepentida,
la sacó de las rejas e impuso otra medida
y ordenó que cumpliera prisión domiciliaria.

VI
Pero ya la estructura de la pobre muchacha
estaba resentida por golpes y desmanes.
No tenía como antes mirada vivaracha
por culpa del maltrato de gendarmes rufianes.

Inmensos moretones adornaban su facha.
Ajadas y desechas se encontraban sus carnes.
Y por el cruel insomnio sufrido en su covacha
se tornaron confusos todos sus ademanes.

Araminta nos muestra su estructura de lirio
pero sigue escuchando las voces del martirio,
y habla de la bolsa que cubría su cabeza.

En libertad defiende sus propias convicciones.
Sufre frecuentemente lógicas depresiones,
y su historia es un rezo de profunda tristeza.

Freddy Belisario Capella.
The Woodlands. Texas.
Octubre 23/2020

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Comentario

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PLUMA MARFIL
Comentario de BEATRIZ OJEDA el octubre 25, 2020 a las 6:00pm

Me has hecho recordar la dictadura militar en Uruguay. Tu poema pinta con verdades monstruosas el calvario de las mujeres que fueron encarceladas y torturadas de mil maneras. Esas mujeres valientes que soportaron los vejámenes más crueles. Algunas lograron sobrevivir. Sé con certeza lo que sucedió porque tengo amigas que lo vivieron. Duele el alma.

Has descripto con gran sabiduría las historias de muchas.

Felicitaciones admirado poeta


POETA DE PLUMA
Comentario de Hugo Mario Bertoldi Illesca el octubre 25, 2020 a las 1:10pm

Tu creación es un extraordinario alegato poético, querido Freddy Jesús. Agradezco compartir y envío mis cálidas FELICITACIONES, que son dobles, pues, pretenden premiar tu talento y tu coraje cívico. Abrazo sureño pleno de orgullo sudamericano, por ti, poeta y Amigo, y por Araminta, Mujer Excepcional. 


PLUMA ZAFIRO
Comentario de Iris Girón Riveros el octubre 25, 2020 a las 10:00am

Leer verso por verso,

entrar en esa constelación de llantos y sufrimientos,

de injustas opresiones, de verdugos de mala fe,

es pedir que seres tan malvados

desaparezcan de la faz de la tierra

y que el nombre de Araminta Gonzales

se pronuncie con reverencia.

Agradecida por el poema escrito

con el alma y el corazón fraternos.

FELICITACIONES poeta Freddy.


PLUMA ÁUREA
Comentario de Benjamín Adolfo Araujo Mondragón el octubre 25, 2020 a las 9:57am

¡Extraordinario poema, con mucha imaginación y pleno de imágenes, Freddy!


PLUMA BRONCÍNEA
Comentario de Ma de los Angeles el octubre 25, 2020 a las 7:59am

DEMASIADAS DESGRACIAS EN TAN POCOS DIAS, MALDITA POLITICA QUE DESTRUYE TODA INTEGRIDAD.

UN PLACER LEERTE


PLUMA CORAL
Comentario de Donald el octubre 25, 2020 a las 3:12am

Wooow!,, espectacular mi admirado Freddy. DD

Creo saber que esta historia se refiere a esta dama.

Araminta González, química venezolana de 35 años, aterrizó en Madrid  , Día de la Constitución. Al fin se sintió «libre». Dejaba más de tres años de pesadilla en Venezuela, en los que fue encarcelada y torturada de forma cruel por participar en las protestas contra el Gobierno de Nicolás Maduro

Si por al libertad y los derechos humanos de todo ciudadano, sea cual fuera su credo, religioso o político. DD


PRESIDENTE HONORARIO
Comentario de Aimee Granado el octubre 25, 2020 a las 12:50am

¡Cuántas penurias y desmanes!

Agravios lacerando cuerpo y alma y la maldad escondiéndose tras falacias que insultan y denigran la integridad humana. 

¡Cuánto dolor e impotencia!

Araminta flagelada en su propia esencia y el equilibrio emocional en peligro frente al acoso moral y físico.

Una historia contada en magistrales sonetos con la genialidad de tu talentoso hacer poético.

Gracias por tan sensible compartir que me ha conmovido intensamente.

Admiro tu capacidad y creatividad inagotable.

Un abrazo.

Ando revisando  cada texto  para corroborar las evaluaciones y observaciones del jurado, antes de colocar los diplomas.

Gracias por estar aquí compartiendo tu interesante obra.

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