VIENTO ORIENTAL

[Orlando Ordóñez Santos]

 

 VIENTO ORIENTAL

Para: Hayré.

 

De pronto… imponente

surgido de la más aturdida

resignación, aquellos ojos vivaces

se impregnaron con una pregunta:

¿acaso dejaste el refugio oriental?

 

En un instante todo fue turbación

y desconcierto, apreté la memoria

no hallé su nombre, pero cada

parpadear hizo despertar lejanos

fulgores de la esquina abandonada.

 

Sin duda frente a frente

el litoral perfilado de sus gestos

tan seguros fue adquiriendo

raro magnetismo de urdimbre simple

con su talla de oriunda selvática.

 

La distancia se había convertido,

en silenciosa culpa de todo,

la incógnita y más el misterio

de la subyugante y disuelta sonrisa

encerraba latente su risueña bondad.

 

¡Ah! majestad de múltiple verdor,

añoranza ilimitada de los sueños,

danza semidesnuda del fuego,

al fin te encontré, aquella mañana cuando

agosto se perdía, otra vez, entre vientos.

 

Orlando Ordóñez Santos.

Derechos Reservados – Imagen de la Red.

[Orlando Ordóñez Santos]

Emocionado por tus puntuales palabras Benjamín Adolfo, sin duda el arte rupestre que envuelve a mis versos, has podido darle un soplo de vida, vida colorida. Gracias y mi abrazo poético.

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

¡Críptico poema, Orlando; me gustó!

[Aimee Granado]

¡Ah! majestad de múltiple verdor,

añoranza ilimitada de los sueños,

danza semidesnuda del fuego,

al fin te encontré, aquella mañana cuando

agosto se perdía, otra vez, entre vientos.

¡Y entre vientos nos dejas las caricias de unos versos maravillosos!

Las metáforas salen al encuentro de la musa quien le susurra sus bondades.

Y el verdor de la añoranza irrumpe en toda su majestad. Y el telar de los recuerdos hilvana los sentires para acortar distancias vislumbrando ese reencuentro en la alborada de un nuevo día.

Una muy bella y sugestiva entrega de tu talentoso tintero.

Felicitaciones amigo por tu inspiración llena de matices.

Un saludo fraterno.