Cual adagio de ese amor que no claudica
junto al trino espiritual de su paciencia,
va mi madre la fiel musa que conquista
y aquilata la esperanza en cada estrella.
Es el eco maternal que no atropella,
fortaleza valerosa que edifica,
es consuelo cuando el llanto me silencia,
y es sin dudas mi leal protagonista.
Acompaña mi horizonte ilusionista
el insomnio del azar que se desvela
y el susurro alentador puro cual brisa
vence el tedio del ayer, triunfa en la espera.
Es su dicha la razón de una quimera
la más tierna en lo sublime y optimista,
en la osada decisión es centinela
y en mirífica virtud forja sin prisa.
Perpetúa su misión, sabia improvisa
desde el alma su tesón hace el prodigio
y el milagro del empeño multiplica
el rosario que atestigua su algazara.
Ella irradia su pasión en la almenara
y entreteje dadivosa, supervisa
el legado que abrillanta su prestigio
cual adagio de ese amor que no claudica.
Aimée Granado Oreña
Gota de Rocío Azul
Comentario
Ella irradia su pasión en la almenara
y entreteje dadivosa, supervisa
el legado que abrillanta su prestigio
cual adagio de ese amor que no claudica.
Precioso querida
MUY PROFUNDO, UN SENTIMIENTO BELLO! UN PLACER LEERTE, SALUDITOS.
Agregado por Nilo 0 Comentarios 1 Me gusta
Agregado por Nilo 0 Comentarios 1 Me gusta
© 2025 Creada por Aimee Granado Oreña-Creadora. Con tecnología de
Insignias | Informar un problema | Política de privacidad | Términos de servicio
¡Tienes que ser miembro de ORGANIZACION MUNDIAL DE ESCRITORES. OME para agregar comentarios!
Únete a ORGANIZACION MUNDIAL DE ESCRITORES. OME