SE CONVIRTIO EN BIBLIOFILO

[J.Jesús Ibarra Rodríguez]

SE CONVIRTIÓ EN BIBLIOFILO

Lupercio no era muy agraciado en lo físico,

y en lo económico limitado, pero quería conocer el amor.

Le habían dicho que la puerta de ese sentimiento,

para todos estaba abierta, y solo bastaba empujarla.

Su mente era un tanto primitiva, y tenía temor de entrar al juego,

de amorosos encuentros.

Busco alternativas para conocer mejor las pasiones,

y  hasta practicó la sideromancia, y estudio la semasionologia,

para saber decirle a las mujeres, las mejores palabras,

componiendo deliciosos diálogos.

Al final se convirtió en bibliofilo, y la lectura le ayudó mucho.

No quería caer en etilismo, tratando de hacer las cosas

en sus cinco sentidos, sin usar artificios.

Hubo un tiempo en que al ver que sus peticiones,

no eran oídas,  pensó en ser iconoclasta,

pero después de leer, a Dios le pidió perdón.

Su amor no era erótico, y se valía de epigramas,

dedicadas a la mujer deseada.

Con todos los conocimientos,experiencias y estudios,

logró conocer y obtener el maravilloso sentimiento,

de una doncella que el idolatraba y lo mejor es que ella lo aceptaba.

J. Jesús Ibarra Rodríguez.

D.R. México.

Imagen de Internet.

[J.Jesús Ibarra Rodríguez]

Estimado amigo poeta Benjamín, soy afortunado con tu gentil visita a mis letras.

Tu comentario es una fuente de animo.

Te envío con afecto un fuerte abrazo fraternal.

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

¡Bellísimo poema, J. Jesús!

[J.Jesús Ibarra Rodríguez]

Maria Mamihega, apreciada escritora y poeta, se engalana mi pagina con tu presencia.

Es muy relevante tu valioso comentario.

Recibe con afecto un fraternal abrazo.

[Maria Mamihega]

BONITA HISTORIA, UN GUSTO LEERLO, CARIÑOS.