Con cuanto agrado te miré y me extasié;
en un mundo donde emergía tu geografía
cálida como un sol, dulce como un bello
girasol a la cual desde que la vi me ilusioné
Inexpresable casi inexcrutable, me resultaba
definirte hasta cuando descubrí tu afable
sonrisa, definida en mares de dicha con
inigualable alegría supe que eras una reina
Los gorjeos no fueron en vano; porque
como humano, muy ufano me deje llevar
fiel a mi humanidad, hasta lograr postularme
como el más leal y fiel de tus admiradores
Esa forma tan dulce de expresarte fueron
presagios, en arpegios en esas noches
de misterio, cuando en el firmamento
las estrellas se extasiaron por tu sentir
Mi razón de ser se transformó en un dulce
versar, agigantado por el convencimiento
del advenimiento de un gran acontecimiento,
al cual yo me dejo llevar para estar contigo
Los motivos se multiplican, en susurros
adheridos a sensaciones como un dogal
que se escurre en el paisaje aireado,
por tu dulzura a lo que yo llamo locura
Nelson
¡Tienes que ser miembro de ORGANIZACION MUNDIAL DE ESCRITORES. OME para agregar comentarios!
Únete a ORGANIZACION MUNDIAL DE ESCRITORES. OME