LOS CAZADORES, LOS PERROS Y LAS LIEBRES ( Fábula )

[J.Jesús Ibarra Rodríguez]

LOS CAZADORES, LOS PERROS Y LAS LIEBRES ( Fábula )

En aquel campo vivían felices una familia de liebres, y lo recorrían

durante el día bajo el luminoso sol, disfrutando del canto de las

aves canoras, y comiendo zacate, hojas y frutos. Tomaban agua de

un arroyo cercano. La madre cuidaba a sus críos, mirándolos crecer,

estando siempre pendiente de su desarrollo. Pero a una joven liebre,

le despertó la curiosidad, cuando le decían que no saliera de noche de

 la madriguera, que resultaba riesgoso. Sin embargo sin hacer caso,

en una ocasión salió de su cueva en horas nocturnas, para caminar

y saber porque le prohibían andar en la oscuridad. Inició su recorrido

y escuchó el sonido de los insectos nocturnos, miró las brillantes

estrellas y la luna en cuarto creciente; también observó las zigzagueantes

luciérnagas con su luz intermitente, además oyó a los murciélagos volando.

De pronto miró una luminosidad que se desplazaba entre la maleza y

ella pensó que era otra maravilla de la naturaleza, y así confiada la

esperó, y esta luz llegó hasta ella y la cubrió, al grado de cegarla y la

dejó inmóvil y sin saber que hacer. Al poco rato escuchó unos silbidos

y luego unos ladridos, todo esto le despertó temor y por instinto,

corrió con todas sus fuerzas al ver que se acercaban unos perros Dalmatas,

que la comenzaron a perseguir; y ya cuando sintió la respiración de los

canes cerca, llegó a su madriguera en donde ya la esperaba la madre liebre

y su familia. Los perros se quedaron a la entrada ladrando y saltando

inquietos. Al poco rato llegaron unos hombres con unas linternas,

que al ver el escondrijo y lo difícil de abrirlo y atrapar a la liebre,

llamaron a sus perros y se dijeron-- mejor vamos a buscar otra liebre que no

se esconda, esta se nos escapó, pero la noche es larga--.

                  Moraleja: Los consejos familiares son valiosos,

                                    salen de experiencias previas, entre ellos

                                   el de advertir que las horas nocturnas

                                  suelen ser peligrosas.

J. Jesús Ibarra Rodríguez.

México. D . R .

Imagen de Internet.

[J.Jesús Ibarra Rodríguez]

Silvana Beatriz Sosa, la cordialidad llega a mi pagina con tu presencia.

Gracias estimada poeta y escritora por la segunda visita a mis letras.

Un amplio abrazo fraternal.

[Silvana Beatriz Sosa]

De nada, J. Jesús.

Te lo mereces.

Te mando un abrazo enorme también a vos. 

[J.Jesús Ibarra Rodríguez]

Silvana Beatriz Sosa, apreciada poeta y escritora, soy privilegiado por tu visita a mi pagina.

Me motiva tu generoso comentario. Gracias por tu felicitación.

Recibe mi constante amistad con un amplio y fraternal abrazo.

[Silvana Beatriz Sosa]

J. Jesús: Excelente fábula has compartido. Me encantó leerla. Te felicito por tu creatividad. 

[J.Jesús Ibarra Rodríguez]

Elias Antonio Almada, amigo escritor y poeta, gracias por estar aqui en mis letras.

Celebro que te haya agradado el contenido de mi trabajo.

Recibe un cordial y fraternal abrazo.