LLOROS

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

LLOROS

Puedo escribir los lloros

más tristes esta noche;

escribir por ejemplo:

el mundo ha terminado...

no hay pájaros que vuelen,

sólo aviones al aire.

Puedo escribir los lloros

más dulces esta tarde:

la noche está madreada

y titila al oriente

un ave de mal agüero.

Puedo escribir los dulces

más empalagosas que haya

paladeado u

oído humano alguno.

Escribir por ejemplo:

las lámparas se apagan

pues la luz no he pagado.

La casa se deshabita

por no pagar la renta.

Puedo tener pendencia

contra malos poetas,

al fin soy uno de ellos

ni la burla perdono...

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

¡Gracias por tu risa, querida Beatriz Ojeda; y eso intenté buscar el recodo para una salida con humor y quitarle lo almidonado al poema; te deseo un miércoles pleno!

[BEATRIZ OJEDA]

Un poema dramático y cómico. Bueno por ambos lados.

las lámparas se apagan

pues la luz no he pagado.

Me desconcerté y me reí aquí

Muchas gracias amigo

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

¡Mil gracias querida Aimée, por tus palabras y el destacado que me otorgas; buena noche y muy feliz martes!

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

¡Así es, María, con la actual situación crítica del mundo por la Pandemia, no nos queda de otra sino agradecer al Cielo por vivir, sin enfermar; gracias por tu lectura y comentario!

[Aimee Granado]

Y las lágrimas destilan añoranzas.

Son tantos los motivos para ello,

en un mundo que cuenta las nostalgias

y se pierde entre ataúdes y silencios...

Así es amigo mío, las adversidades nos socavan a pesar de que la esperanza no nos abandona y la fe multiplica sus bondades.

No obstante la realidad se enfrenta a momentos cruciales y el poeta en su devenir acicala sus azares.

Un franco compartir, directo y lleno de sentires.

Gracias por estar presente.

[Maria Oreto Martínez Sanchis]

Así estamos todos, amigo mío, con la que nos está cayendo. En España ha aumentado los contagios y las muertes. La economía está por los suelos...
Recuerdo la felicidad que experimenté el verano pasado, en el que viajamos mi familia y yo, estaba contenta porque me jubilaba en diciembre, con sesenta años y muchos años, parecía, para disfrutar. Actualmente no sé nada. Ruego todas las noches por mi familia y por el mundo.

Un abrazo y ánimo.