EL TOPO Y LA ARDILLA (Fábula)

[J.Jesús Ibarra Rodríguez]

EL TOPO Y LA ARDILLA (Fábula)

En el jardín de una casa, vivía un topo negro, de cuerpo redondo, sin orejas,

con ojos muy pequeños, que pasaba el tiempo excavando, haciendo

túneles bajo la tierra; moraba a oscuras y se alimentaba de los ratones

que se acercaban a su madriguera. Allí mismo existía una ardilla con su

pelaje gris y blanco y rojo en su abdomen, que comía frutos secos, bellotas, bayas,

cortezas, huevos y pájaros pequeños. Pasaba los días subiendo y bajando de

un frondoso árbol, y ahí mismo en un hueco, tenia su nido.

Un día se encontraron los dos en el pasto y tuvieron un dialogo,

y la ardilla lo inicio diciendo -topo yo vivo bien y tengo buena alimentación,

pero a pesar de que me escondo debajo de las hojas que caen del árbol, tengo temor

a los depredadores, así que te quiero pedir que me permitas vivir en tus túneles

a salvo de todo, en lo oscuro y tranquilo-. Entonces le contestó el topo - mira amigo

no tengas temor, que no te voy a comer, pero mejor sigue tu vida, mirando el

sol de día y las estrellas y luna por las noches-. Se me olvidó decirte que a veces

ponen en esta casa, menta y mostaza y no me agradan-, dijo la ardilla.

El topo le respondió enseguida, - pues sopórtalo a mi también me acercan a la

planta ruda, y con su olor la paso muy mal, así que para nadie hay un sitio ideal-.

Así el topo de la familia Talpidae, se despidió de la ardilla gris, volviendo

a recalcar que mejor se adaptara a su hábitat, evitando en lo posible

depredadores, ruidos y olores de plantas y otros materiales desagradables.

Finalmente la ardilla aceptó su natural destino conviviendo en ese lugar con el topo.

Moraleja: El cambio en hábitos y costumbres, puede generar problemas y disgustos.

 

J. Jesús Ibarra Rodríguez.

México. D . R .

Imágenes de Internet.

[J.Jesús Ibarra Rodríguez]

Elias Antonio, Amigo poeta gracias por tu gentil visita.

Un fuerte abrazo fraternal.

[J.Jesús Ibarra Rodríguez]

Críspulo Rufino, amigo escritor y poeta, gracias por estar aqui en mis letras, y por

comentarlas con generosidad.

Recibe un fuerte abrazo allende los mares.

[J.Jesús Ibarra Rodríguez]

Delia Pilar, se ilumina mi pagina con tu grata presencia.Te agradezco infinito tu valioso comentario,

y el que hayas DESTACADO la Fábula.

Te envío con afecto un amplio abrazo fraternal.

[Delia Pilar]

Preciosa fábula con una moraleja que vale tener en cuenta.

Indudable que no hay sitio ideal, cada uno tiene sus pros y contras. 

Adaptarse conviene al individuo y a la especie. 

¡Felicitaciones, J. Jesús!