AMOR DE OTOÑO

[Delia Pilar]

Empecemos por vivir, 

enseguida veremos 

cómo hay que morir.

Maeterlink

Mi amor…

llegas cuando la vida

plateó mis cabellos...

cuando mis rosas

ya se marchitaron,

esas que acompañaron

la pasión…

¡no importa!

Pon tu cabeza

en mi regazo,

acariciaré la sombría plata

que en ella ostentas

mientras recibes este amor,

dulce fruta madura,

pleno de silencio,

que te brindo…

pasó ya el impulso

febril que sexo

y alma agita,

El otoño llegó…

¡con su tierna

y serena melancolía!

 

Delia Checa - D. A. R.

Mendoza, Argentina

 

[Delia Pilar]

Muchas gracias, Kin, por tu lectura y comentario .

Delia

[Delia Pilar]

Muchas gracias, Ronny, por tu lectura y comentario tan acertado.

Saludos desde Argentina.

Delia

[Delia Pilar]

Muchas gracias,Manuel.

Saludos amistosos desde Argentina.

Delia

[Delia Pilar]

Muy agradecida, Carlos Eduardo.

Saludos desde el verano de mi país.

[Delia Pilar]

Muy hermoso y sabio comentario, Ma. Beatriz.

Me encantó y te lo  agradezco de corazón.

Un abrazo.

Delia

[kin Mejia Ospina]

"

Empecemos por vivir, 

enseguida veremos 

cómo hay que morir."

esta frase de Maeterlink  es toda una filosofía,y está un poco en contraposición con tu poema,poema bello, no estoy diciendo lo contrario, un beso querida poeta.

[Levy Ronny Benlabrat]

Mi amor…
llegas cuando la vida
plateó mis cabellos...
cuando mis rosas
ya se marchitaron,
esas que acompañaron
la pasión…
¡no importa!
Todos a una cierta edad tenemos estos sentimientos, generalmente se considera que la primavera es la estación ideal para el discurso sensual del cuerpo, en primavera tenemos un espíritu festivo y un ánimo bien despierto para los dulces juegos del amor. En otoño las cosas son diferentes, parece que entramos en un estado de letargo, y si es una questión de edad avanzada, eso ya es casi un colapso...jaja..la época del celo ya es un sueño. Somos como las plantas, nos llenamos de savia y colores en primavera y de desolación en otoño e invierno, nuestro poder de seducción ya no es el mismo, nuestro cuerpo carece de brío y estímulo, nuestra intimidad ya no es tan fértil...es la ley de la naturaleza. Nosotros los poetas en edad avanzada sabemos todo esto, el otoño es una maravillosa época de nostalgia e imaginación para escribir bellísimos poemas en un lecho de hojas rojas, naranjas y amarillas.
Un fuerte y cálido abrazo desde el frío invierno de Israel.
Ronny

[MANUEL ANTONIO IBARRA ACOSTA]

Hermoso tu amor de otoño mi apreciada Delia. Felicitaciones muy sinceras y reitero afectos y saludos desde Caracas/Venezuela.

[Carlos Eduardo LAmas Cardoso]

Delia,

El amor no tiene edad y llega siempre en su momento. 

Bello y dulce poema.

Saludos y bendiciones!

[Maria Beatriz Vicentelo Cayo]

Mi amor…

llegas cuando la vida

plateó mis cabellos...

cuando mis rosas

ya se marchitaron,

esas que acompañaron

la pasión…

¡no importa!

Desde luego que aquella tardanza no es lo importante, lo valioso y significativo es que llegó.  Y llegó con la fragancia sutil del amor hacia la compañera, aquella que ansiosa espera, un abrigo cálido con la tibieza en flor.  Tiempo habrá pasado mas hay un minutero que no avanzó,  quedó aletargado contemplando la belleza real que una vez se dio.  Hoy miramos sus ojos que nos iluminan igual al ayer; no nos fijamos si tiene arrugas,  si se le ha caído el cabello,  basta que esa mirada amada sea de él.  ¡Y vuelven amiga aquellas golondrinas que se fueron,  al mismo lugar,  porque extrañan aquella rama por el tiempo gastada pero la aman no por su apariencia sino porque ahí aprendieron a volar!

pasó ya el impulso

febril que sexo

y alma agita,

El otoño llegó…

¡con su tierna

y serena melancolía!

Cuando pasa la primavera   cesa el revoloteo de los mirlos, mariposas y hasta las flores dejan de colorear.  La estación cambia de un brillante colorido a un gris OCRE otoñal, mas no por eso la pasión desaparece solo disminuye de intensidad.  Las hojas caen para ser humus en la tierra y continuar sirviendo, continuar con el placer de DAR.  Pero es un proceso que finaliza en el invierno.   

Creo que te estás refiriendo  a un  invierno crudo y cerrado donde la pasión hormonal  duerme para nunca despertar. Porque en otoño aún hay hierbas enhiestas que empiezan a doblarse;   y todavía escuchamos a un  pajarito por ahí  trinar y depende de su fortaleza para que todavía pueda procrear. 

Mas cuando el otoño da paso al invierno, recién ahí en el invierno llega el retiro total;  con los huesos que duelen y que con las justas se puede caminar,  crees tú que estaremos para una noche pasional?  Eso es  un hecho tácito que se da cuando uno es ya un vejestorio, lamentablemente es así  TODO TIENE SU TIEMPO.

Solo para el poeta no hay tiempos, él es lo que quiera  ser.  Recordemos que la poesía es producto de la imaginación principalmente.

Y en estas cosas del sexo creo que mucho tiene que ver nuestro físico, porque si estamos todas gordas, despanzurradas, sin cintura   ¿qué ganas vamos a tener para una intimidad?  Nos daría vergüenza mostrar nuestro cuerpo;   pero si nos hemos cuidado, hacemos ejercicios, sentimos nuestros músculos aún bien puestos y fuertes,   pues se siente orgullo que a una edad "madura"  se  pueda  tener todavía un cuerpo relativamente joven.

 Gracias Delia Pilar, aquí tenemos bien representados "otoño"  e  "invierno"  en el hombre.  La diferencia se nota claramente, el primero no es un jovencito pero aparentemente todavía puede tener una noche pasional;  quien está a su lado;   si,   está ya en el invierno, está para  una vida sedentaria.  Con las justas está de pie.