LOS MISTERIOS DE DIOS

[Coco]

LOS MISTERIOS DE DIOS

(Párrafos del libro “Los misterios de Dios” de Héctor D. Páez)

 

1/ 10. El escritor siempre debe transitar en la verdad, para tener libertad de “expresión” y libertad de reflexión sobre cualquier tema. La verdad duele, pero es inevitable, muchas veces destruye ilusiones, pero recuperamos autonomía. No todos tienen la capacidad para detectar la honestidad, un aspecto importante en la ética y moral son las actitudes y decisiones que tomamos en nuestra vida. Son muy pocos los que conocen o detectan el valor de la verdad absoluta, de la verdad relativa y la verdad mundana. Viendo al sol, puedo, comprender la razón de su función en el universo, es parte de un todo para todos. En cambio, sí trato de encontrar razones funcionales de la luna para el universo, no la encuentro. Su luz, no es propia, pero apropia su poder magnético, propiciando la actividad de la vida en la tierra. Carece de calor, sin embargo, es magnética, pero necesaria. El calor se puede evitar, en cambio lo magnético es imposible de evitarlo. Así es la verdad absoluta, inevitable, pero redime saludablemente.

 

2/ 10). A los protestantes, los misterios de la verdad de Dios, les crea serios problemas, y eso los hace transitar en el engaño, apartándose de su doctrina, de su rebaño y de la verdadera Iglesia de Jesucristo. ¿Será porque no aman la verdad?

He acá la nombradía “Anticristos”, la biblia los destaca, a los protestantes, como generación de católicos que, “Salieron de nosotros, pero no eran de nosotros; porque si hubiesen sido de nosotros, habrían permanecido con nosotros; pero salieron para que se manifestase que no todos son de nosotros.” (Juan 2;19) Satanás cree en Dios, en el Hijo y en el Espíritu Santo, pero no ama la verdad. (Santiago 2;19)

La ceguedad espiritual no les permite “ver” que este versículo los señala a ellos. No existen otros en el mundo que hayan pertenecido a la Iglesia de Cristo. Pues salieron de la generación de Lutero.

3/ 10). La vida eterna y la salvación manifestada en Jesús y comunicada al rebaño de su Iglesia, no a las iglesias de los protestantes, en ese tiempo, año 33, no existían. Las sectas surgieron 1400 años después, de la mano de Martin Lutero.

4/ 10. En el caso de los judíos que participaron, su generación niega al Hijo del hombre abiertamente, no creen en Jesús, no entienden que negando al hijo niegan al Padre: “Todo aquel que niega al Hijo tampoco tiene al Padre; el que confiesa al Hijo tiene también al Padre.” (Juan 2; 23)

5/ 10). En el caso de los PROTESTANTES es más grave aún, no niegan al Hijo, pero niegan su verbo (a su espíritu), desobedecen sus leyes, sus mandamientos. No creen en la eucaristía, pues Jesús ordenó: “hagan estos en conmemoración mía” (Lucas 22;19) No creen en la vida eterna y en la salvación de “comer su cuerpo y beber su sangre.”; Jesús sentenció: “… hay algunos de vosotros que no creen. Porque Jesús sabía desde el principio quiénes eran los que no creían, y quién le había de entregar.” (Juan 6; 64)

“Desde entonces muchos de sus discípulos volvieron atrás, y ya no andaban con él.” (Juan 6;66)

6/ 10. La acción de los protestantes es gravísima Poseen otra doctrina, generada por una biblia (hecha por hombres), con diferente teología, etc. Con el número favorito del anticristo 666. Con 66 libros y el otro seis surge del “nombre de la marca” BIBLIA o VALERA, sumando sus letras de ambos nombres: B + I + B + L + I + A = seis (6). Si le parece mejor: B + A + L + E + R + A = SEIS (6).

7/ 10. Ustedes dirán, eso es casualidad, cosa conjetural de hombre. Pues VEAMOS que nos dice la misma biblia: Apocalipsis 13; 18 “Aquí hay sabiduría. El que tiene entendimiento, cuente el número de la bestia, pues es número de hombre. Y su número es seiscientos sesenta y seis.”

Note como resalta tres (3) veces “número” (la verdad del misterio). Destacando la relación número con el anticristo 666 y al hombre como el “falso profeta”.

Complemente esta información con Apocalipsis 15;2 “… la bestia y su imagen, y su marca y el número de su nombre,”

Este versículo es más objetivo que el anterior, pero ambos revelan la IMAGEN, la MARCA y el NUMERO de su NOMBRE.

8/ 10. No todos los hombres de Dios pueden visualizar este MISTERIO, porque la biblia dice, que solo lo “verán” los descendientes de Abraham, el Padre de la fe.

Gálatas 3:16: “…, las promesas fueron hechas a Abraham y a su descendencia. No dice: y a las descendencias, como a muchas, sino a una: y a tu descendencia, es decir, Cristo.” A los que serán verdaderos cristianos. A los que están en la Iglesia que fundó cristo en Pedro y le dio la llave de los cielos: Apostólica y católica (Universal).

“… para que se manifestase que no todos son de nosotros.” (Juan 2; 19)

Porque fuera de esta descendencia habrá falsos profetas que fomentarán la apostasía: “Y muchos falsos profetas se levantarán y engañarán a muchos.” (Mateo 24;11)

“Guardaos de los falsos profetas, que vienen a vosotros vestidos de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces. (Mateo 7;15)

9/ 10. En el caso de algunas organizaciones judías niegan al Hijo del hombre, sin duda, no saben que negando al Hijo niegan a Dios. Eso los caracteriza como los anticristos. En el caso de los protestantes, no niegan al hijo, pero niegan, protestando, a su verbo, el espíritu de la verdad, no le creen al Espíritu Consolador. La desobediencia a su verbo, los hace anticristos.

¿Cuáles son las pruebas de esta acusación?

a-) Niegan y menosprecian la CONFESIÓN para recibir el PAN Eucarístico. “Hagan esto en conmemoración mía” (Lucas 22; 14-20)

b-) Niegan y menosprecian a los MINISTROS DE LA EUCARISTÍA, los Sacerdotes. “Por tanto, id, y enseñad a todas las naciones, bautizándoles en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo;” (Mateo 28;19)

c-) No creen en los Santos, piensan que son dioses. No saben que todos los cristianos somos Santos/as. “…. cuántos males ha hecho a tus santos en Jerusalén;” (Hechos 9;13 - Colosense. 1;4)

d-) Menosprecian a la Virgen María, no creen que es Virgen y aseguran que fue multípara.

e-) No comprenden el carácter personal del Espíritu Santo, no saben o no comprenden el “misterio”, que junto a la hostia puede ingresar el E. Santo. o Satanás, según la liberación mental del pecador.  Lucas 22; 3 “Entonces Satanás entró en Judas, llamado Iscariote, que pertenecía al número de los doce;”

f-) Niegan y aborrecen al Papa, el Vicario embajador y representante de Dios en la tierra. Mateo 16; 18-19 “Y yo también te digo, que tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi iglesia; y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella.Y a ti te daré las llaves del reino de los cielos; y todo lo que atares en la tierra será atado en los cielos; y todo lo que desatares en la tierra será desatado en los cielos.”

g-) Poseen una biblia inspirada por el hombre. Desconocen que la Escritura Sagrada católica fue INSPIRADA por el ESPÍRITU CONSOLADOR:

“Si ustedes me aman, obedecerán mis mandamientos. Y yo le pediré al Padre, y él les dará OTRO CONSOLADOR para que LOS ACOMPAÑE SIEMPRE: el ESPÍRITU DE VERDAD, a quien el mundo no puede aceptar porque no lo ve ni lo conoce. Pero ustedes sí lo conocen, porque VIVE CON USTEDES Y ESTARÁ EN USTEDES. No los voy a dejar huérfanos; volveré a ustedes. (Juan 14; 15-18)

10/ 10. El misterio de Dios está en la VERDAD, develada por la Escrituras Sagradas (E.S.), que lleva el sello del Espíritu Santo (E.S.). Viviendo “con ustedes y estará en ustedes” para Eterna Salvación (E.S.). – Toda trinidad asegura PERFECTA veracidad.

Quien ama la verdad encontrará “el camino la verdad y la vida”. Las Sagradas Escrituras enseña la fe que sana, (por confianza, entendimiento) la fe que salva (por obediencia) y la fe por gracia (don del favor).

“Entonces Jesús dijo al centurión: Ve, y como creíste, te sea hecho. Y su criado fue sanado en aquella misma hora.” (Mateo 8;13) La fe que sana

“El tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado; arrepentíos, y creed en el evangelio.” (Marco 1;15) La fe que salva

“Los sacerdotes principales y los maestros de la Ley vieron las cosas tan asombrosas que Jesús acababa de hacer y a los niños que clamaban en el Templo: «¡Hosanna al hijo de David!». Estaban furiosos. ¿En los labios de los pequeños y de los niños de pecho has puesto la perfecta alabanza”? (Mateo 21;15-16) La fe por gracia. -