LA EXPRESIÓN DEL MUNDO INTERIOR: NARRATIVA Y POESÍA

[Alejo Urdaneta Fuenmayor]

LA EXPRESIÓN DEL MUNDO INTERIOR ES CREACIÓN LITERARIA
NARRATIVA Y POESÍA

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Después de decretada la total ruptura del estatuto de los géneros literarios, y eliminadas las fronteras entre la poesía y la prosa, los nuevos creadores se han lanzado a la búsqueda de sus propios medios de expresión, que van desde el rescate de formas que parecían olvidadas como el barroco; la llamada poesía concreta –que más parece poesía tecnológica – hasta la superación de los lenguajes exclusivos, llegando a una dimensión metalingüística que en algunos casos respalda la afirmación de Hegel “de que para el espíritu moderno la reflexión sobre el arte terminaba siendo más interesante que el arte mismo”. En tales casos, el lenguaje constituye el objeto mismo de la narración, bien convirtiéndose en trama, personaje, fondo; todo a la vez. En esa disolvencia: lenguaje-objeto-actor-paisaje, se llega al final de los relatos, no sin advertir antes que en ellos no pasa nada, o casi nada, y que toda la estructura de lo que se cuenta es una relación de palabras cargadas de subjetividad y objetividad. La lengua no es el instrumento, el medio de comunicación, sino el espectáculo total.
La narración lineal, tradicional, ha sido cuestionada porque su motivo fundamental son los hechos, la historia de los sucesos, descuidando las sugerencias del lenguaje, las vivencias del escritor, el fondo interior de la novela o el cuento, sin hablar de la poesía como participación para objetivar y proyectar la comunión de los seres en expresión analógica: La poesía es lo absoluto.
De lo dicho podemos concluir en la idea de que la creación literaria pertenece por igual a la narración y a la poesía.

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

¡Oportuna reflexión, Alejo; con muchas madejas para sacarlo y desmenuzar!