EL CARACOL Y LA OLA ( Fabula )

[J.Jesús Ibarra Rodríguez]

EL CARACOL Y LA OLA (Fabula)

Un caracol que vivía en el fondo del mar, se desplazaba con toda libertad, y para él

todo era felicidad. Pero le surgió una inquietud: nunca había salido a la superficie,

y un día al mirar hacia arriba donde la luz se filtraba, la curiosidad lo atrapó.

Asi que decidió subir a lo alto para ver lo que allí existía, así que ascendió despacio

hasta que se topó con una ola que lo comenzó a llevar. Esta ola al verlo tan indefenso

le advirtió que a donde ella iba era muy peligroso, que llegaría a una playa de arena

candente, donde solo se veían restos de otros caracoles y de ostras, que las gaviotas

se los comían, y solo dejaban las conchas secas y sin vida.

Pero el caracol nada creyó y siguió viajando con la ola, y al mismo tiempo le decía

-llévame contigo, quiero conocer otros entornos, allá abajo vivo muy aburrido.

La ola le dijo- sea pues así tu lo has querido. Pronto llegaron  a la orilla y allí la ola

lo depositó. El caracol sintió de pronto calor y temor al ver los deshechos de

otros caracoles, ostras y hasta estrellas de mar; además miró como una gaviota

descendió hasta otro caracol que caminaba con dificultad, y tomándolo con el pico

se lo llevó. Fue cuando comprendió los riesgos que tenía ese lugar. Así que pensó

mejor regresar a la tranquilidad de su hábitat. Solo que en ese momento bajó la

marea y las olas se alejaron. El sintió mucho calor y la sensación de deshidratarse;

además miró unas gaviotas que lo detectaron y comenzaron a descender hacia él.

Pero la buena suerte lo acompañó, ya que entre la arena se formaron unos canalillos

que llegaban hasta las alejadas olas, y lo más rápido que pudo se desplazó por uno

de ellos, hasta que llegó a una ola, la que lo llevó hasta su natural entorno.

Apenas tubo tiempo de conocer, esa lengua de tierra, llena de arena, impresionante,

de belleza fascinante pero peligrosa.

Moraleja: Antes de conocer un lugar, debes de investigar, informarte a que te vas a enfrentar.

Investigar los riesgos que pueden surgir.

J. Jesús Ibarra Rodríguez.

México.D.R.

Imagen de Internet.

[Teodora E. Leon Salmon]

De mucha enseñanza su prosa poética, estimado amigo.
Saludos cordiales
Teodora

[Vilma Lilia Osella]

Así es Jesús. Que suerte tuvo el caracol!!

Vilma Lilia

[J.Jesús Ibarra Rodríguez]

Benjamín Adolfo Araujo, poeta y amigo, soy afortunado con tu grata visita a mi texto.

Te agradezco infinito el valioso comentario que haces del contenido.

Recibe un fraternal abrazo en la distancia.

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

¡Preciosa prosa poética, J. Jesús!

[J.Jesús Ibarra Rodríguez]

Elias Antonio Almada, estimado amigo gracias por recorrer mis letras.

Celebro que te hayan agradado.

Un fraternal abrazo.

[J.Jesús Ibarra Rodríguez]

Carmen Amaralis Vega, estimada y activa escritora, gracias por visitar mis letras.

Tu comentario es muy bondadoso.

Recibe con mi amistad un abrazo cordial.

[Carmen Amaralis Vega Olivencia]

J Jesús, buen relato con buena moraleja, gracias por compartirlo, Amaralis

[J.Jesús Ibarra Rodríguez]

Delia Pilar, ilustre y activa poeta, gracias por seguir mis letras.

Tu comentario es fuente de motivación.

Te reitero mi gratitud por concederle al texto el valioso DESTACADO.

Te envío con afecto un abrazo fraternal.

[J.Jesús Ibarra Rodríguez]

Silvana Beatriz Sosa, apreciada poeta y escritora,  soy afortunado con tu grata visita a mis letras.

Tu comentario tiene un alto valor.

Te agradezco que hayas DESTACADO el texto.

Recibe mi inalterable amistad con un abrazo fraternal en la distancia.

[Delia Pilar]

¡Muy hermosa y sabia fábula! 

Muy aleccionadoras conclusiones. 

¡Felicitaciones, J. Jesús!