Si no hay mañana para mí,
quiero que sepas señora vida,
que te amé y disfruté hasta el extremo,
porque fui siempre consciente
que tus hojas son cristales frágiles;
que los bienes, la fama, la belleza, pronto se apagan.
No tendría nada que reprocharte,
me diste conforme a mis acciones y trabajos,
más aún me diste más de lo que merecía:
mucho amor y felicidad en tu regazo.
Si no hay mañana,
sepan amigos, familia esposo,
que siempre los quise,
a mi manera imperfecta quizás,
con errores y limitaciones de pequeño gusano humano.
Si no hay mañana,
hoy pido perdón a mis amigos, familia,
por alguna palabra, gesto, acción u omisión
que dañaron sus sensibles figuras humanas;
soy de polvo
de humo y de nada,
sin la luz de Dios solo un ser frágil hecha de pecado y nada.
Si no hay mañana para mí,
quiero morir dejando ejemplo
a mis hijos, a mi sociedad,
de una mujer valiente, aguerrida que no se dejó vencer por nada,
que ayudada de Dios
siempre enfrentó la vida,
la enfermedad, las derrotas, con la cabeza erguida y confiada;
siempre con alegría esperanzada.
Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-Derechos reservados
Comentario
Gracias Silvana bella
Edith... tienes razón completamente en tu comentario... uno no sabe si el virus se lo va a llevar a uno o no... es tan incierto todo... en fin...
te mando un abrazote.
Gracias Beatriz querida
Gracias Ma de los ángeles
Gracias Silvana es así amiga me preparo pues uno nunca sabe con el virus o sin él algún día moriremos
Si no hay mañana para mí,
quiero que sepas señora vida,
que te amé y disfruté hasta el extremo,
porque fui siempre consciente
Ay mi amada amiga, sí, van haber todavía muchas mañanas y Dios va a querer que nos conozcamos personalmente. No me escribas de esta forma que me llena de honda tristeza!
Pero entiendo, que el alma del poeta vuela por posibilidades y eso ya me calma y alegra. Y mira que bellas tus intenciones, qué hermosos tus sentimientos, qué valiente y que agradecida con esta vida!
Si no hay mañana para mí,
quiero morir dejando ejemplo
a mis hijos, a mi sociedad,
de una mujer valiente, aguerrida que no se dejó vencer por nada,
que ayudada de Dios
siempre enfrentó la vida,
la enfermedad, las derrotas, con la cabeza erguida y confiada;
siempre con alegría esperanzada.
Van mis aplausos con mucho reconocimiento mi bella amada compatriota!
Infinidad de besos admirada poeta!
MUY BUENAS LETRAS EDITH
Agregado por Nilo 0 Comentarios 1 Me gusta
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