ROTO
Vida que se quiebra al leve contacto con una paralela realidad,
pedazos de historias y recuerdos desperdigados por cualquier lugar,
aquí un trozo de mirada, acá media caricia, por allá, los labios que alguna vez se atrevieron a besar.
Me niego a reconocerlo, ¡No! no es mi vida la que se ha hecho trizas,
alguien más debió romper su realidad...
Yo soy... yo he sido... yo seré...
¡No! me niego a ser sólo recortes de papel, rompecabezas de mi historia que sin más se diluye entre fragmentos que se irán sin remedio a la basura.
Si yo fui grande entre los grandes; mis ojos vieron lo inimaginable, mis manos sintieron el calor de otra piel, y mis labios besaron otros labios que bebieron de la misma sed.
Soy yo en una sola pieza, sin fracturas ni remiendos... sin fijador o pegamento.
Soy yo... con mis giros y mis vueltas, con mi locura en la cabeza, con los años en la mirada, y el implacable y mustio cansancio sobre la espalda.
Sí, soy yo, el que hoy está en pedazos al borde del olvido, con lágrimas divididas que serán un medio río.
Y muero aquí ahora, y muero allá después, en el basto espacio en donde se dispersan los pedazos amorfos de mi cuerpo.
Carlos Eduardo Lamas Cardoso.
México.
Derechos reservados.
Comentario
María Beatriz,
Gracias por tus lectura y desde luego, el amplio comentario, que sin duda es complemento de mi escrito.
Saludos y bendiciones!
Y así moriremos todos Carlos Eduardo, retaceados primero, para ser polvo después.
A veces me pregunto, muy a escondiditas de mi Señor, ¿Qué objeto tiene la vida? La vida tiene como objetivo darnos la posibilidad u oportunidad para todos por igual, dejar huellas en ella. ¿Nuestra misión? Prolongar nuestra especie; todo lo demás será añadido, medido y pesado por la gracia de Dios. Y nos aferramos a Él, Carlos Eduardo, porque somos náufragos en el mar de la existencia, donde en temporales de nada sirve saber nadar.
Seguirá pasando el tiempo, otros van creciendo, mientras nosotros nos vamos empeñeciendo en todo sentido, en fuerzas, en visión, memoria, reflejos, hasta que no quede nada de nosotros amigo, NADA! Seremos recuerdo con mucha suerte, para dos generaciones más, porque para los hijos de nuestros nietos, seremos acaso una referencia y hasta ahí llegamos; porque para delante, ya estaremos en el olvido.
¡Santos cielos, fuerte tu aportación!
Me ha conmovido,
¡Un abrazo Carlos Eduardo, compañero de letras de tanto tiempo!
Profunda como grandiosa tu reflexión en magnífica narrativa!
Mis cariños
Silvana,
Gracias por tu amable comentario.
He visitado tu canal de youtube, y en cualquier momento pasaré nuevamente.
Saludos y bendiciones!
Carlos:
Excelente texto has logrado. Mis felicitaciones.
Quería invitarte a que revises mi nueva página de Youtube donde he subido mis poesías convertidas en canciones hechas con inteligencia artificial.
> El link directo es por acá:
> https://www.youtube.com/@SilvanaSosa2024
Agregado por Nilo 0 Comentarios 1 Me gusta
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