PROUST Y LA ESENCIA DE LA NOVELA (APRECIACIÓN DE PROUST)

[Alejo Urdaneta Fuenmayor]

(BRAQUE)

PROUST VISTO POR ORTEGA Y GASSET

El último gran libro novelesco -la ingente obra De Proust- declara todavía más esa secreta estructura, llevándola en cierto modo a su exageración.
En Proust la morosidad, la lentitud llega a su extremo y casi se convierte en una serie de planos estáticos, sin movimiento alguno, sin progreso ni tensión. Su lectura nos convence de que la medida de la lentitud conveniente se ha traspasado. La trama queda casi anulada y se borra el postrer resto de interés dramático. La novela queda así reducida a pura descripción inmóvil, y exagerado con exclusivismo el carácter difuso, atmosférico, sin acción concreta, que es, en efecto, esencial al género. Notamos que le falta el esqueleto, el sostén rígido y tenso, que son los alambres en el paraguas.
El universo de Proust está hecho para ser percibido en forma de respiración porque todo en él es ambiente. Nadie hace nada ni pasa nada. Todo es una pasiva sucesión de situaciones estáticas.
Deshuesado el cuerpo novelesco se convierte en nube informe, en plasma sin figura, en pulpa sin dintorno, aquello que no ves, es decir su distribución interna, su estilo de decoración en la escena, ... son su DINTORNO".
Por esta razón, he dicho antes que aunque la trama o acción posee un papel mínimo en la novela actual, en la novela posible no cabe eliminarla por completo y conserva la función, ciertamente no más que mecánica, del hilo en el collar de perlas, de los alambres en el paraguas, de las estacas en la tienda de campaña.
Mi idea -que antes de ser rechazada por el lector- merece de su parte, alguna meditación, y es que el llamado interés dramático carece de valor estético en la novela como género, pero es una necesidad mecánica de ella. La razón de esta necesidad se origina en la ley general del alma humana, que merece siquiera una breve exposición.

[Ronald Bonilla Carvajal]

Muy bueno, gracias, abrazos

[Maria Beatriz Vicentelo Cayo]

Pero aún así con "la trama  casi anulada borrándose el postrer resto de interés dramático" creó el esqueleto de su novela, con la consecuente lectura de algunos interesados.

Lo que nos hace concluir que nada es absoluto.

Muy interesante y de nivel.

Muchas gracias.

[Ernesto Kahan]

Ese es siempre el dilema de los escritores poetas cuando ejercen el campo de la novela. Y sigo pensando, como siempre...

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

¡Breve ensayo sobre la lentitud e inacción en Proust, Alejo!