"Paren el mundo que me quiero bajar"
Quino en boca de su personaje "Mafalda"
El pánico invade las calles, agarrota los sentires y destrona al corona virus, ahora está desplazado por ese sentimiento gregario y primitivo que, en principio, es protección para el individuo pero en determinados casos termina royéndolo por dentro cual una planta malsana. En esos casos le impide pensar como un ser solidario, convierte en piedra el corazón palpitante que hasta ayer se volcada solidariamente hacia sus congéneres y termina por verse a sí mismo como el “ombligo del mundo”. El miedo se propaga más rápido que el virus y, quizás, si medimos en cantidad de víctimas y efectos a corto y mediano plazo, con efectos más nefastos.
Una cosa es la prevención, útil y con efectos altamente comprobables, y otra muy distinta tomar medidas alocadas y en ocasiones inefectivas impulsados por el miedo.
Todo lo que creíamos sólido e inmutable termina derrumbándose, una ola de inseguridad nos atenaza y nos preguntamos… ¿vale la pena tanto desasosiego, tantas guerras y ambición por apoderarse de riquezas que no nos pertenecen? ¿Es bueno postergar a nuestros seres queridos a fin de llenarlos de elementos suntuarios que a la hora de la Verdad (como esta que intenta concientizarnos) no les sirve de nada? ¡Dejemos caer la venda de los ojos y empecemos a gozar de este presente y de lo simple de la vida que, al final de cuentas, es lo único seguro que tenemos y lo que menos esfuerzos nos demanda!
Delia Checa – D. A. R.
Mendoza, Argentina - 2020
Comentario
¡Muchas gracias, Benjamín!
¡Saludable reflexión, estimada Delia; no a la Pandemia de Pánico...!
Muchas gracias, Haydée.
Esperamos que así sea por el bien de todos.
Un abrazo.
Muchas gracias por la lectura y TU APORTE
tan aleccionar como sabio, Lucía (me encantó).
Un abrazo fraterno.
Delia
Muchas gracias, Ingrid.
Espero que estés bien.
Un abrazo fraterno.
Muy hermosas y reflexivas tus letras, estimada Delia. Mi abrazo sincero.
Muchas gracias, Rosa,
por tu sabio comentario.
Fue muy grato leerlo.
El miendo infunde sentimientos encontrados y muchos no saben que hacer y actûan como personas irracionales. Por miedo, se cometen muchos errores y es, por ello, que debemos actuar con calma y sin perder el sentido de responsabilidad con nosotros mismos y con los demás seres que son vulnerables a estos acontecimientos.
Un placer leerte, mi reina.
Saludos y buenas noches.
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