Nada es igual DESTACADO

[marco gonzalez]

Nada es igual

 

Nada es igual,

 me lo indican mis decaídos ojos,

 lo gritan mis ermitañas manos,

lo difunde mi cansado cuerpo,

 me lo revela el presente,

porque en lo acaecido anido.

 

Nada es igual,

ni el tibio acento de mi voz,

ni el color de mi cabello.

ni la oscuridad

de mi insatisfecha mirada,

ni este momento doliente.

 

Nada es igual,

ni el rumor de mi sediento río,

ni el aletear de mis pestañas,

ni el color de mi risa,

ni la simetría de mi corazón

que sin ti ha enmudecido.

 

Nada es igual,

ni la oscuridad de las noches,

ni mi amante poesía,

porque la dulzura de mis prosas,

se enlutaron tras tu partida.