He puesto a dormir una aguja en la noche,
de punta como un puñal inocuo que nos mira
con su único ojo indivisible,
difícil de acertar.
Lo arrullo ahora sobre el almohadón
en que se pierde siempre
cuando nos quiere punzar.
Junto a él, desfallece un ovillo de algodón
que se asoma en silencio entre las telas.
Pero ya que al menos creo que duerme
invento una canción de cuna sin vocales,
un susurro capaz de hacer incómodas preguntas:
¿por qué vinimos a este páramo tranquilo
cuando a la noche la perturban tantos ruidos distantes,
tantas luces girando entre los cuerpos?
¿Por qué podemos escribir garabatos
mientras el gato vuelve a maullar
buscando una salida?
¿Por qué morir para darle sentido a la tumba
y a la vida?
dE UN NUEVO LIBRO INÉDITO
DERECHOS DE AUTOR PROTEGIDOS POR LEY
Comentario
Gracias, Críspulo por tu bello mensaje, abrazos
Gracias, Natuka, por tu buena lectura y bello comentario, abrazos
Agregado por Nilo 0 Comentarios 1 Me gusta
Agregado por Nilo 0 Comentarios 1 Me gusta
© 2024 Creada por Aimee Granado Oreña-Creadora. Con tecnología de
Insignias | Informar un problema | Política de privacidad | Términos de servicio
¡Tienes que ser miembro de ORGANIZACION MUNDIAL DE ESCRITORES. OME para agregar comentarios!
Únete a ORGANIZACION MUNDIAL DE ESCRITORES. OME