EVOLUCION

[J.Jesús Ibarra Rodríguez]

EVOLUCIÓN

Algo que está encima de mis recuerdos, aun me emociona.

Fue la evolución de un eucalipto que creció en un patio, y que fue desde

pequeño el orgullo del lugar, por su gran belleza natural. Con el paso del tiempo,

se tornó en un hermoso árbol, con fuertes ramas y tupidas hojas,

que brillaban con el sol y daban una sombra generosa.

Pero un día por desconocidos motivos empezó a deshidratarse, y hasta

su raíz por falta de humedad, se volvió áspera y oscura; así que dejó de

tener de las aves la visita. Pero en una ocasión llegó hasta él una paloma,

que pareció estar feliz en el seco árbol. Y es que a ella no le agradaba

que en los arboles con hojas, llegaban otras palomas haciendo ruidos,

gorjeos y murmullos. Deseaba estar sola y allí encontró el sitio deseado.

 Se quedó hasta la noche, disfrutando al mirar las estrellas brillar y sin ruidos

que escuchar. Por la mañana salió a los campos a buscar alimentos y al

atardecer regresó al árbol, creyendo que estaba solo; no fue así

ya que estaba un palomo parado en una rama seca, porque también

él buscaba la calma. Se comunicaron a su manera y coincidieron en

sus gustos. Así que ahora se les ve gozando entre las ramas secas,

en ese ambiente unidos y muy contentos.

J. Jesús Ibarra Rodríguez.

México. D . R .

Imagen de Internet

[J.Jesús Ibarra Rodríguez]

Elias Antonio Almada, estimado amigo poeta, gracias por estar aquí en mis letras.

Me alegra que sean de tu agrado.

Un fraternal abrazo.

[J.Jesús Ibarra Rodríguez]

Estimado amigo  poeta, Críspulo Rufino, gracias por estar aquí en mis letras, y por comentarlas

con generosidad.

Un fuerte abrazo fraternal hasta España.