EL ARROGANTE

[Hildebrando Rodríguez]

EL ARROGANTE SE MONTA EN UN PEDESTAL

DE ODIOSA SERVIDUMBRE

 

Claro que sí, mejor es que lo eleve

propio valor y buen comportamiento,

y no quienes le sirvan de sustento,

mientras su base tambalea y se mueve.

 

Pero en ese vaivén, que es insolente,

quiere seguir por siempre la persona

y debe ser porque jamás razona

ni atiente a los mandatos de su mente.

 

Exhibe cual bandera la arrogancia

y piensa que le aporta promoción,

pero lo que demuestra es petulancia.

 

Costumbre que genera confusión,

que a la mejor la trae desde su infancia

y siempre le ha nublado la visión.

 

Hildebrando Rodríguez

Mérida – Venezuela, 28 de abril del 2022

[Hildebrando Rodríguez]

POETA BENJAMÍN ADOLFO ARAUJO MONDRAGÓN:

Gracias por tu criterio sobre mi soneto titulado
El Arrogante.   Un saludo cordial.

Hildebrando.

[Benjamín Adolfo Araujo Mondragón]

¡Bello y sabio soneto, Hildebrando!

[Delia Pilar]

Y sí, Hildebrando, generalmente ese tipo de defectos se arrastran de la infancia

aunque con tratamiento y voluntad se pueden superar. 

Indudablemente es muy desagradable tratar con una

persona así, es generador de muchos conflictos.

Gracias por tu soneto ético.