Estamos en pleno ajetreo por la Fiesta de Navidad y cada cual según su capacidad económica ya decidió qué juguete comprar, la marca de chocolate y panetón y que ave o mamífero sacrificar para celebrar las Pascuas.

Como si fuera una competencia, cada cual trata de comprar el regalo más caro para satisfacer los requerimientos navideños de la prole. No solamente sucede en los hogares, sino también en las empresas e instituciones. Las tareas cotidianas, han dado paso a los arreglos navideños y cada uno se empeña en realizarlo de la mejor manera. Hay otro sector de personas comprometidas con la realidad nacional en la cual haciendo un gran despliegue propagandístico, se  portan con chocolatadas en la que los beneficiados son los niños sin lugar a dudas. Otros dan la impresión que se aprovechan de este acontecimiento de multitudes, para recuperar imagen, popularidad, credibilidad con el pueblo y tratan que sus debilitadas figuras retornen a la vida como por un milagro, sacando a luz el lado bueno de su persona y lo hacen regalando en cantidades, juguetes que hacen muy feliz a la gente  pequeña. Mientras que en los grandes, deja el sabor amargo de la conveniencia y de aprovechamiento del momento para resurgir de las cenizas del olvido. Es que a veces los cadáveres resucitan y siguen viviendo por un tiempo más. Haciendo una somera reflexión sobre este acontecimiento, tenemos que el 25 de diciembre significa la venida al mundo del hombre más humano de la tierra. Es que en Jesucristo se reúnen todas las cualidades que el ser humano debe tener. A pesar de su grandeza, la humildad lo acompañó desde un primer momento y le dio el toque a su personalidad por ser divino. De ahí, que hacer de la Navidad un momento de ostentación, comilonas, donde el licor corre a raudales, feria de regalos, es realmente un exceso que no tiene nada que ver con el espíritu navideño. Cada cual puede hacer de su dinero lo que le venga en gana, nadie se opone a ello: lo único que hacemos ver es  cuál es el verdadero significado de la Navidad y cómo se debe celebrar y qué enseñanzas nos debe dejar. En este sentido, aquellos que toman a la inocencia infantil como caballito de batalla y ascender  posiciones en el ámbito social, es una acción que desdice mucho de su  persona como ser social. No solamente este día el niño debe jugar y reír. Lo que hay que hacer es cada uno de nosotros se convierta en una fuente de amor e irradie candor por doquier en todo instante. El niño no puede gozar 24 horas y vivir en la penumbra 364 días al año por la desigualdad social y materializado sistema. Cada uno debe ser la llama que flamee sin cesar de enero a diciembre. Para ello, cada hogar debe ser el reflejo de un gobierno que no permita la crisis social, moral y económica. Estando la familia sin necesidades apremiantes porque al menos tiene un trabajo que le permite vivir holgadamente, recién vamos a poder decir Feliz Navidad y Prospero Año Nuevo con propiedad, porque realmente hay bonanza lo que deriva en una niñez con mañanas de gloria. Mientras tanto,  no es posible darse ese lujo de desear felicidades cuando una gran mayoría sufre por dentro y esboza una sonrisa por fuera porque ya esta cansado de llorar y ya no sabe a quien quejarse por lo que se ha resignado a su situación y reza a Dios porque como siempre, cuando todo está perdido, el Divino Redentor es el paño de lágrimas de miles de peruanos que subsisten porque él si es  grande. Es que siempre hubo, hay y habrá individuos que hace tiempo  sus ilusiones y sueños se esfumaron con el viento, cansados de tantos gobiernos que vieron primero la suya que los intereses mayoritarios de las grandes masas en extrema pobreza. Por eso resulta irónico desearnos lo que no existe, augurar lo que es una quimera,  celebrar lo que jamás cumplimos, agradecer a Dios cuando no se le respeta. Ya esta bueno de hipocresía. La mejor forma de celebrarlo es en unión familiar y si solamente hay un pan, eso se debe comer y no envidiar pavo, por que la fastuosidad no hace la Navidad, está en el corazón y en la sonrisa inocente de un niño que no debe dejar de jugar porque es parte de su tiempo. Después, puede ser muy tarde. Cada año la deshumanización de la persona avanza tanto que está perdiendo su encanto la Navidad y eso no se debe permitir. En el mundo católico Dios es amor, paz, futuro y objetivo común por los siglos de los siglos.

14-12-2019

Por: Fidel Alcántara Lévano

Moquegua-Perú

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Respuestas a esta discusión

Hermoso cuento reflexivo, que hace un llamado a la toma de conciencia por los verdaderos valores sociales.

Gracias por participar.

Mi estimada Milagros, recibe mis saludos con todo afecto. Muchas gracias por tus palabras y comprensión. Éxitos, felicidad y prosperidad. Un abrazo de todo corazón.

Muito verdadeiro.A vida se encarrega de desfazer sonhos e esperanças.Devemos com nossas atitudes e amor renovar essas esperancas em cada um e em nós mesmos. Feliz Natal

Mi estimada Isabel Cristina, recibe mis saludos con todo afecto. Muchas gracias por tus expresiones  y comprensión. Éxitos, felicidad y prosperidad por siempre. Un abrazo con todo mi cariño.

Fidel...

Son tan ciertas y sinceras tus palabras, que en verdad duele saber todo lo que ocurre y no poder hacer nada para remediar la situación.

Por otra parte, es verdad, estas fechas deben ser para alabar la llegada al mundo del Niño Dios; pero lamentablemente se le ha dado otro sentido a estas fechas y solo se piensa en gastar en tantas cosas innecesarias; pero la sociedad es la culpable de todo ésto, somos animales de costumbre y así seguiremos; aunque hayan personas como tu y quizás como yo, que piensan en todos aquellos seres que en este momento, no podrán conmemorar estas fechas.

La vida es injusta... pero hay que vivirla.

Gusto leerte.

Saludos

Mi estimada Iris, recibe mis saludos con todo cariño. Muy agradecido por tus expresiones y comprensión. Éxitos, felicidad y prosperidad. Un abrazo  con toda mi alma.

Una muy reflexiva narración con un valioso mensaje de conciencia.

Ha sido un placer leerte.

Mi estimada Aimée, reciba mis saludos con todo mi afecto. Le agradezco de todo corazón por sus opiniones. Exitos  y felicidad por siempre. Un abrazo desde Perú.

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Ando revisando  cada texto  para corroborar las evaluaciones y observaciones del jurado, antes de colocar los diplomas.

Gracias por estar aquí compartiendo tu interesante obra.

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